domingo, 14 de junio de 2009

Carta abierta a las fuerzas de seguridad del estado


Ninguna persona con un mínimo de inteligencia puede, a esas alturas, seguir creyendo que los políticos nos representan cuando a todas luces la clase media estamos bajo un ataque total y continuo y mientras nuestro dinero presente y futuro se le da a la banca a base de billones de euros sin fin.

Es totalmente obvio que los políticos son meros esbirros de la banca y no tienen problema alguno en arruinarnos hasta hacernos pasar hambre, pulverizando nuestros derechos y libertades siendo su único interés beneficiar a sus amos de la banca.

Miembros de las fuerzas de seguridad del estado. Jugáis un papel fundamental en estos tiempos tan difíciles que estamos viviendo todos los que no pertenecemos a la élite criminal que nos gobierna tras la farsa política.

Se os va a exigir que defendáis a la élite mientras somos, y sois, destruidos por ellos.

Vosotros no pertenecéis a la élite criminal sino a la mayoría que está siendo destruida. Vuestra obligación última no es cumplir las leyes y ordenes ciegamente si estas son aberrantes e injusto sino que es proteger el bien común.

Os debéis a la mayoría a la que pertenecéis, vosotros y vuestros amigos y familiares.

No solo no tenéis que obedecer leyes u ordenes injustas que van contra el bien de la mayoría sino que es imperativo que arrestéis a los políticos y a los banqueros lo antes posible. Los políticos son traidores al pueblo y los banqueros son unos estafadores chantajistas a los que hay que detener cuanto antes.

Como ya se ha dicho, jugáis un papel fundamental. Vuestra labor es clave para asegurar que nuestros derechos y supervivencia se protege de una banda de delincuentes sin escrúpulos que han decidido destruirnos.

¡Desobedeced a los criminales y arrestad a políticos y banqueros ya!.
La traición al pueblo es el peor crimen que un político puede cometer. El saqueo que está realizando la banca debe pararse ya.

De vosotros depende nuestro y vuestro futuro y bienestar. No permitáis la destrucción que han planeado para nostros. No permitáis que sus crimenes sigan impunes.